jueves, 28 de octubre de 2010

El culto a los muertos no es de Dios

La escritura es muy clara con respecto a la adoración de los muertos y nos dice que este culto es abominación delante de Dios.

la mayoría de las personas cren que el festejar a los muertos (Halloween y Día de muertos) es una tradición inofenciva y que no tiene nada de malo disfrazarse o poner un altar a sus muertos. La palabra altar se refiere a un lugar elevado (en la antiguedad por lo regular era hecho de piedra) donde se ofrecen sacrificios a las deidades. La palabra de Dios es muy clara con respecto a la adoración y los sacrificios a otros dioses, en Deuteronomio 5:7-9 Dios manda no tener dioses ajenos delante de Él, que no debes inclinarte ni tener imagen (idolos) de nada, entonces al colocar un altar para los muertos los estás adorando y te estás inclinando ante ellos, además te estás haciendo imagen (un idolo) de la(s) persona(s) a la(s) que dedicas el altar.

La tradición nos dice que los muertos regresan de sus lugares de descanso y comen de lo colocado en el altar para ellos, Dios dejó muy claro que las personas no pueden regresar a la tierra después de muertas y por lo tanto no pueden comer de lo que se les ofrece. (Job 7:9-10; y 20:7-9; Hebreos 9:27; Lucas 16:19-31)

Respecto al punto anterior, así mismo como los muertos no pueden regresar a este mundo, tampoco pueden hacer contacto con nosotros por ningún medio y quien dice tener contacto con los muertos en realidad hae contacto con los demonios, en Primera de Samuél vemos un ejemplo de cómo Saúl consulta una adivina y podemos ver el mal que Saúl trajo pra si (Deuteronomio 18:9-12; 1ª Samuel 28; Isaías 8:19-20; Hechos 16:16; 1ª de Corintios 10:20)

Dios advierte que quienes hacen tales cosas no heredarán el reino de los cielos (Mateo 15:10-20; Gálatas 5:19-21; 1ª Corintios 6:9-10)

Si has caído en alguno de estos engaños, no te preocupes, pues Dios a travéz de Jesús nos proporciona el camino de verdad (Juan 14:6), si decides seguirlo Dios mismo te dará las armas para dejar tu pasado atras y comenzar una nueva vida en Él.

Dios les bendiga.

A. Rublúo